martes, 6 de febrero de 2018

PERFECT II


Os dejo el enlace de la primera parte por si no lo habéis leído o quereis volver a hacerlo:



http://dsr77.blogspot.com.es/2018/01/perfect.html






PERFECT II


     A través de las vidrieras puedo comprobar que fuera del bar musical la tormenta no afloja. ¡Es lo que tiene la primavera! No tengo claro si me embriaga más la música ochentera o las cervezas que tomé durante la cena, pero no paro de reír y bailar; me siento bien. Esta noche no tenía muchas ganas de salir, pero cuando me dijeron de pasar un rato por aquí, la posibilidad de verle, aunque fuese de lejos, me hizo cambiar de opinión.




     Y ahí está, guapísimo, como siempre. Lleva ese jersey a rayas que tan bien le queda y esa barba cortita que me muero por acariciar. Está perfecto esta noche. Intento evitar mirarle porque sé que notará que mis ojos brillan cuando se cruzan con los suyos y me pondré colorada. No puedo dejar de sonreír cuando noto que me observa desde la esquina de la barra, con esos ojitos en los que quiero leer tanto sin llegar a estar segura de lo que me dicen. Aprovecho que los cierra después de beberse un tequila para mirarlo sin disimulo.




     Ven, vámonos. Acompáñame a pasear bajo la lluvia hasta que encontremos un charco en el que meternos a bailar. Camina conmigo sobre la arena mojada y cómeme a besos. Hagamos que nuestros suspiros alejen las nubes y la luna nos ilumine hechos un ovillo a la orilla del mar. Quiero que me hagas ver las estrellas, que me subas al cielo y me devuelvas a la vida trayéndome a la cama un café y un beso. Quiero que mañana sea otro día, pero que esta noche, sea nuestra noche.



     De repente abre los ojos y me sonrojo y no puedo evitar sonrojarme porque creo que me sonríe. Me giro y sigo bailando, pronto se marchará. Mis amigas se ríen al verme. Llevan mucho tiempo intentando que dé el primer paso, pero me cuesta horrores. Silvia se acerca a decirme algo al oído y sin venir a cuento me empuja. Tropiezo y cuando estoy a punto de caer noto que alguien me rodea con sus brazos. Reconozco su jersey. Por primera vez noto su aroma.  La canción que estaba sonando termina y empieza a escucharse una muy distinta…


5 comentarios:

  1. Me has hecho sonreír con ternura David. Has sabido captar muy bien esos sentimientos contradictorios, ese querer y no querer y esa risa boba que alguna vez todos sentimos cuando el chico o la chica que nos gustaba creíamos que nos miraba. Me ha parecido muy dulce como está expresado. Espero que les vaya muy bien.
    Un beso

    ResponderEliminar
  2. Pues, efectivamente, el relato anterior no acababa ahí. Hemos conocido a las dos "medias naranjas", con sus respectivos deseos que, al fin, parecen confluir y prometen un final feliz.
    Hemos visto dos versiones de una misma historia, relatadas desde dos perspectivas distintas. ¡Cuántas veces la indecisión trunca una bonita historia de amor!
    Me ha gustado mucho la forma con la que das voz a los personajes y describes la situación y el entorno.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. La otra parte de la historia cuadra a la perfección con la primera, David... ay, es lo
    que tiene el amor, que a veces no nos damos ni cuenta de que somos correspondidos... bonito no-final ;) ¿seguirás con el relato?
    Un abrazo y abrígate que llueve, nieva y hace frío (nada que ver con la Primavera)

    ResponderEliminar
  4. Una nueva vuelta de tuerca a los sentimientos y a las sensaciones David,... y ya solo quedaba un empujoncito. Buen fin de semana!

    ResponderEliminar
  5. ME GUSTO MUCHO, SOLO "EL BAR MUSICAL" NO ME CONVENCE ,ES SOLO MI OPINIÓN CLARO

    ResponderEliminar